EL
FUEGO
Tu
color, tu fuerza, tu olor,
pienso
en la grandeza que tienes,
en todo
lo que posees,
Si
tengo frio calientas,
o destruyes
con tu ardor.
En
el bosque del verano,
que
seco esta del calor,
y
del paso del ganado.
El olor a piñas secas,
a
bosque, a naturaleza, a pequeñas
mariposas
que vuelan de cerca en cerca.
Un campesino
faenando, ha comenzado una hoguera
y quemando los rastrojos, y con la ayuda del
viento,
una
brizna salta fuera, y se acopla a la hojarasca,
y
empieza a prender con fuerza
y
quema esa vieja encina, que prende como la yesca,
te extiendes
por las laderas,
arrasando
donde vas, con tu fuerza magistral,
ahuyentando
a las ardillas, y a mil animales más.
Que
de ti salen corriendo, aterrados sin igual,
buscando
un camino libre,
para
la muerte esquivar, con esas llamas furiosas,
que
ni el mar puede apagar,
llorando
dejas a gente,
llorando
el bosque está, de arrasarlo hasta la muerte,
de tu
poder infernal, aunque tú, pobre inocente,
lo que
quieres es libertad.
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