CUANDO EL CUERPO SE HACE VIEJO

CUANDO EL CUERPO SE HACE VIEJO

Cuando el cuerpo se hace viejo...,

no acompaña a la mente,

parece como que no, 

pero me lo recuerda constantemente.

Luchando contra el reúma,

mientras tanto pienso en bailar hasta la una,

pero mis piernas hinchadas...,

no me dejan, ¡que guarrada!.

Y la serie de la tele quiero ver...,

pero mis ojos cansados,

se cierran una y otra vez,

capitulo tras capitulo me habré perdido ya tres.

Cuando llegan ya mis nietos...,

y me hacen agachar...,

me acuerdo hasta de su madre...,

y en su padre mucho más.

Está claro que aunque quiero,

mi cuerpo se niega a ello,

mi cuerpo ardiendo en deseos,

que los bomberos no pueden, apaciguar tanto fuego.

Pero yo sigo cuidándome,

arreglandome bien el pelo,

maquillando mi sonrisa,

aunque gaste medio sueldo.

Porque yo en mi interior,

mi corazón no está viejo,

tengo ganas de correr,

y de comerme hasta el cielo.

A si que no tu no me trates,

como un periódico viejo, 

y piensa que joven fui,

y tú llegarás a viejo.