martes, 24 de junio de 2014

TORMENTA EN EL PINAR




      TORMENTA EN EL PINAR  

Huelo el aire que me envuelve,
siento el olor a naturaleza,
el cielo plomizo a punto de caer.

Todo huele a tierra mojada,
el pino desprende su aroma,
los pies me crujen bajo un manto de pinocha.

Yo sigo avanzando, esquivando piñas,
piedras, y troncos viejos caidos
a los que las termitas han tumbado.

Me fijo, y vislumbro una encina,
entre tanto pino, y pinocha....
como me atrae, el sonido de la naturaleza

Veo una enorme roca llena de musgo,
todavia húmedo, estoy deseando tocarlo,
está suave como el terciopelo.

Caen las primeras gotas, mojandome...
miro al cielo y a penas puedo verlo,
todo lo cubre un tejado verde.

Truena, y se me ponen los pelos de punta,
y una pequeña y fria brisa empieza a
darme frio, y me estremezco...

Me siento sola, pero me gusta así,
sin nadie, en este estremecedor momento,
pienso..., estoy sola, aquí no hay nadie.

El sonido que la soledad desprende,
cierto grado de temor y a la vez libertad,
mi corazón se acelera, y casi consigo oirlo.

Un rayo atraviesa el horizonte majestuoso,
con su terrible belleza me quedo perpleja,
al fondo del pinar vislumbro el sol.

Una pequeña niebla lo cubre todo
pero al fondo, sigo viendo el sol,
y con la lluvia el arco iris se extiende 

El arco perfecto con todos los colores,
de mi mundo y mi felicidad, allí,
todos juntos para abrirme un nuevo camino.


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